Durante el transcurso de su taller nos ha ido ilustrando con todo tipo de consejos sobre nuestros trabajos, con sus anécdotas, fobias, sobre los procesos,... y tantas otras cosas con las que me he sentido identificada y otras muchas que me han dado que pensar. Pero para no extenderme las he reducido en una especie de top ten que pienso le define muy bien:
● Odio dibujar clases con 34 pupitres... ¡eso es horrible! ni supermercados ni coches.
● Me gusta contar chistes... ¡hay que divertirse!
● No sé si los niños tienen mucho respeto a las cosas como la biblia, las leyes,... entonces ¿porqué tengo que tenerlo yo?
● Me gusta contar mentiras.
● Los niños no son como nosotros, tienen su propia jungla, sus propias reglas... por lo que contar sus historias es como contar las de un enanito en un mundo grande, en la que todo tiene una escala mayor de la que debería tener.
● Todo el mundo debe tener algo que le motive y a mi me gusta utilizar el humor.
● Mucho de lo que escribo lo observo directamente de los niños y luego lo recuerdo.
● Yo no me invento nada... solo observo.
● Primero está la historia, después las ilustraciones. Si un libro tiene una mala historia y unas ilustraciones preciosas, el libro no funcionará. En cambio si una historia es buena y el dibujo es malo, el libro puede ser bueno.
● A los niños les gusta que los animales se los coman...